La firma detrás del chatbot ChatGPT ha lanzado su más reciente creación en inteligencia artificial, GPT-4, un salto adelante en una tecnología que ha fascinado al mundo entero.
El innovador sistema es capaz de deducir aspectos fiscales y responder preguntas al estilo de un corsario shakespeariano, aunque todavía presenta «alucinaciones» de datos y errores en el razonamiento.
Exploremos el último avance de OpenAI, la empresa emergente con sede en San Francisco, en los modelos generativos de inteligencia artificial que producen textos comprensibles e imágenes originales:
¿CUÁLES SON LAS NOVEDADES?
Según OpenAI, GPT-4 muestra un «desempeño a la altura del humano». Este sistema es más fiable, creativo y puede tratar «instrucciones más sutiles» en comparación con su predecesor GPT-3.5, en el que se fundamentó ChatGPT, como lo mencionó OpenAI en su comunicado.
Durante una demostración en línea el martes, el presidente de OpenAI, Greg Brockman, presentó varios ejemplos que evidenciaban las habilidades de GPT-4, lo cual sugería una mejora significativa respecto a versiones anteriores.
Brockman mostró cómo el sistema podía calcular con rapidez la deducción impositiva correcta al analizar extensos códigos tributarios, tarea que él mismo no logró realizar.
«Aunque no es perfecto, tampoco lo somos nosotros. Juntos, se convierte en una herramienta potenciadora que nos permite alcanzar niveles nunca antes vistos», comentó Brockman.
¿POR QUÉ ES RELEVANTE?
La inteligencia artificial generativa, como GPT-4, podría representar el futuro de internet, al menos según Microsoft, que ha invertido al menos $1.000 millones en OpenAI e incorporó tecnología de chatbots de IA en su navegador Bing.
Esta innovación forma parte de una nueva generación de sistemas de aprendizaje automático que pueden dialogar, generar textos legibles a petición y crear imágenes y videos inéditos a partir de una amplia base de datos de libros digitales y textos en línea.
Estos avances en inteligencia artificial podrían transformar el negocio de las búsquedas en línea, liderado durante años por Google, que intenta mantenerse a la par con su propio chatbot de IA y en numerosas profesiones.
