Un chico de 23 años quedó atrapado en un poste metálico de la vida pública en la localidad francesa de Gard en Nimes. Cuando llegaron al lugar, los bomberos se encontraron con un rescate muy complicado.
De hecho, los servicios de emergencia tuvieron que llamar al Ayuntamiento para asegurar el perímetro, interrumpir el suministro eléctrico y cortar la estructura con una sierra eléctrica para ampliar la abertura y sacar al desafortunado.
La solicitud de ayuda llegó gracias a un vecino que estaba dando un paseo cuando vio unos metros asomando por la abertura de un poste. Eran las 8:30 de la mañana y las extremidades emergieron de la farola, ubicada frente a un conocido hotel urbano.
Según France Bleu, la operación de rescate duró más de una hora, pero el joven estudiante se dio cuenta cuando lograron sacarlo del tubo. Después de todo ese tiempo cabeza abajo, el joven fue trasladado al hospital para un reconocimiento médico.
Las autoridades explicaron que, al parecer, el joven de 23 años intentó recuperar su teléfono móvil que se había caído, deslizándose en el poste por una pequeña abertura, sin embargo, su intento solo sirvió para quedar atrapado.